pollock y el contexto de la modernidad
Cuando se habla del arte es difícil definir que se cataloga como “arte” y que no. El cómo se clasifica depende de perspectiva e interpretación. El hombre ha utilizado este medio desde siempre para expresar sus frustraciones con respecto a la sociedad, lo que ocurre, las injusticias y para canalizar los sentimientos de manera distinta. Tras cada pieza de arte hay una historia y Jackon Pollock, pintor que creó una de las más grandes obras conceptuales: el expresionismo abstracto. Un movimiento fue marcado por este concepto el cual trata de mostrar fuertes expresiones y emociones. Su arte era el resultado de interpretaciones de su entorno. Pollock es un ícono del arte abstracto.
Al ver las pinturas de Pollock hay dos posibles reacciones: o piensas ‘esta obra es de un genio’, o piensas ‘¿Cómo se ha vuelto tan famoso si eso lo hago yo?’. El éxito de Pollock se debe a curiosidad que inspiran sus interpretaciones. No solo abstraía sus pensamientos y observaciones, lo hacía de una manera no muy ortodoxa para aquel entonces. Su éxito no solo es or su trabajo, si no producto de una imagen que quería ser vendida. Pollock era, por decirlo de una manera, la cara bonita del movimiento abstracto. Él era el que le mostraría al mundo sobre el arte abstracto. Pollock llamaba la atención pues era un hombre americano que le daba un toque masculino al arte abstracto, no somo su esposa. Pollock fue visto por el hombre de negocios Clement Greenberg, que, a pesar de no ser buen artista, tenía el ojo de uno. Clem era el ojo en el mundo oculto del arte, quien decidía quien salía a la luz y quien no. Esto dicho, podemos entender que el éxito de Pollock no es solo por su talento, si no por que alguien pensó que haría buen negocio y buena publicidad. No estaba en lo incorrecto pues Pollock se ha vuelto en un artista reconocido por su arte poco convencional.
El artista se relaciona con la arquitectura cuando tomamos en consideración que le sirvió se inspiración a arquitectos como Gaudí, Mies y Le Corbusier. Vemos, una vez más, como el arte se puede relacionar con la arquitectura. De una pintura se pueden sacar interpretaciones para un proyecto, quizás hasta un concepto entero. Tal como Le Corbusier utilizaba sus pinturas como Partí para sus proyectos, otros arquitectos utilizaban a Pollock para dirigirse dentro de sus propias obras, para expresar ideas que quizás no se expresan con palabras. Cuando alguien no es artista puede recurrir al arte de otra persona para expresarse. Como un poema, pensamientos e interpretaciones distintas a un mismo fenómeno o de un mismo contenido.
En conclusión, creo que el arte de Pollock comunica todo lo que el guardaba y no expresaba verbalmente. Aun así, no lo veo tan maravilloso como para tener un cuadro de él, no digo que no lo considero arte. Pienso que con Pollock ocurre lo siguiente: es tan simple que las personas piensan que debe haber algo más allá, ya que no les cabe la idea de lo simple que puede ser. Me Parece interesante como tantas personas le sacan tantas interpretaciones a una sola pieza de arte de Pollock, yo también tengo las mías. Y sin duda alguna también podemos aprender que muchas veces no se trata de arte, si no del nombre ya que en parte el artista del que se habla es producto de una movida de negocios.
